En 2001 hice este conjunto rojo de top y pantalón, muy fresquito para el verano.
En 2001 me hice este traje de chaqueta con manga francesa y falda recta para un bautizo.
En 2001 también hice este vestido largo para una boda con una seda tornasol en lila que es un color que siempre me ha encantado. Como era transparente, jugué con un forro del mismo color, que comenzaba a medio escote, y llevaba una abertura en el lateral desde la cadera hasta abajo.
En 2002 este otro vestido me lo hice para otra boda, porque vi esta tela de encaje calado en morado y la compré para cuando surgiera algo, le puse un forro rosa pálido para resaltar el dibujo del encaje.
En 2005 también para una boda, me hice este traje de blusa y pantalón (la chaqueta de esmoquin no), jugando también con la transparencia y el contraste del fondo blanco.
En 2008 otro vestido para boda, ahora me doy cuenta que me gustan mucho los géneros transparentes.... Y la historia también me repite, me gustó la tela y la compré para ver que se me ocurría... y me hice este vestido entallado largo con un poquito de cola incluso, y un bolero a juego.
Más reciente en el 2010, para un bautizo me hice este vestido "chica ye-ye", con forma trapecio no se como se llama ese escote, pero me gustó y se lo puse. La pena es que no se aprecie mejor la foto, pero la tela es un verde mar y lleva unas hebras como de hilo en otros tonos que era preciosa.
Este armario también tiene su historia... era rosa con florecitas y está totalmente hecho a mano, me lo hizo mi tío Juan, que era tallista de madera y pintor (el verdadero artista de la familia), y me lo hizo para mis muñecas... como siempre estaba en mi habitación, pues cuando supe que traía un niño, lo cambié de color y le puse otros dibujos para que se combinara con la nueva habitación, y en él guardaba toda la ropita de recién nacido.
Estos dos cuadros, también los hice embarazada de mi primer hijo, para decorar su habitación, están bordados a mano con lana.
Y este Moisés o capazo, fue la primera cunita de mi bebé, era el que tuvo mi hermano pequeño, y mi madre me ayudó a arreglarlo y vestirlo, le pusimos todas las telas nuevas, y además yo le hice ese saquito de ondas en piqué beige y celeste, que lo mantenía tan calentito a todas partes que lo llevaba.
Y nació mi hijo Javier en 2003... y comenzaron las fiestas del cole y sus disfraces... algún jersey, una bufanda... y ocupó la mayoría de mi tiempo, por lo que aparqué esta afición por la aguja...
Por el 2008 me aficioné por el ganchillo, me compré el típico coleccionable, que tenía diferentes temáticas... y además de mis numerosos broches de mariposas (que ya conocéis), le hice un par de conjuntos de ganchillo con perle a mi segundo hijo Alejandro cuando nació, para que estuviese fresquito todo el verano.
Hasta que llegó como sabéis 2011, y mi operación de rodilla me hizo frenar el ritmo, y sentada delante del ordenador descubrí el maravilloso mundo que ocultan los blog de tantas artesanas y artistas que lo comparten... y el resto de la historia ya está aquí reflejada entrada a entrada.
Y es que toda historia tiene un porqué, un antes y un después...
